miércoles, 26 de agosto de 2015

Castillejos 1860. Historia de una bandera

A mediados del siglo XIX, las ciudades españolas de Ceuta y Melilla sufrían constantes agresiones por parte de los rifeños, alentadas por el Sultán de Marruecos. Ante esta situación, España decidió materializar la defensa de los límites de Ceuta mediante la construcción de una serie de fuertes como había sido pactado en el Convenio de Larache.

1860. Bandera del 2º batallón del Regimiento Córdoba nº 10.
(Recreación)
 
En agosto de 1859 un destacamento del ejército español, que daba protección a las obras de reparación del fortín de Santa Clara, fue atacado por los rifeños de Anyera, que destruyeron parte de las obras de fortificación y arrancaron y ultrajaron el escudo de España. Cuando la noticia llegó a la Península, una ola de indignación recorrió el país. El general O'Donnell exigió al sultán una reparación así como un castigo a los causantes de la afrenta, cosa que no se produjo. Finalmente el gobierno tomó la decisión de declarar la guerra a Marruecos, iniciándose así la Guerra de África que duraría 4 meses.

El ejército expedicionario español que partió de Algeciras, estaba compuesto por unos treinta y seis mil hombres, sesenta y cinco piezas de artillería y cuarenta y un navíos entre buques de vapor, de vela y lanchas. O'Donnell dividió las fuerzas en tres cuerpos de ejército en los que puso al frente a los generales Ramón de Echagüe (1º), Juan Zavala de la Puente (2º), y Antonio Ros de Olano (3º). También formaban parte del ejército expedicionario la División de Reserva bajo el mando del general Juan Prim y una división de caballería al mando de Felix Alcalá-Galiano.

Los objetivos fijados eran incrementar y asegurar el área de dominio de Ceuta, la toma de Tetuán y la ocupación del puerto de Tánger. El 17 de diciembre se iniciaron los combates por la columna mandada por Zabala que ocupó la Sierra de Bullones.  El día de Navidad los tres cuerpos de ejército habían consolidado sus posiciones y la defensa de Ceuta, y esperaban la orden de avanzar hacia Tetuán.

La División de Reserva del general Prim será la encargada de marchar en vanguardia y abrir camino.  El general con sus tropas penetran  en el valle de Castillejos avanzando decididamente, con el apoyo al flanco del general Zabala y el de la flota, que mantenía a las fuerzas enemigas alejadas de la costa.  Consigue llegar hasta el fondo del valle estableciéndose en las alturas que lo cierran. Pero pronto los moros inician continuos contraataques empeñando fuerzas muy superiores en número a las españolas. La lucha se recrudece en torno a la casa del Morabito.
Las líneas españolas empiezan a ceder ante la gran cantidad de fuerzas que contraatacan. Dos batallones del Córdoba pertenecientes al 2º cuerpo son enviados a reforzar a Prim. Al llegar dejan sus mochilas en la ladera de un montículo y entran en acción. Pero la continua llegada de fuerzas marroquíes hacen retroceder a las fuerzas españolas, quedando las mencionadas mochilas en campo contrario. La lucha continúa. El general Prim no deja de arengar e impulsar continuamente  a sus tropas, pero la línea española cede poco a poco, no consiguiendo frenar el empuje enemigo. Es el momento crítico de la batalla, cuando de repente, Prim ve ondear ante sus ojos la bandera nacional que lleva el abanderado del 2º batallón del Córdoba y tomándola en su mano gritó:
 
¡Soldados! Vosotros podéis abandonar esas mochilas, porque son vuestras; pero no podéis abandonar esta bandera porque es la de la patria. Yo voy a meterme con ella en las filas enemigas…. ¿Permitiréis que el estandarte de España caiga en poder de los moros? ¿Dejaréis morir solo a vuestro general?..... ¡Soldados!.... ¡Viva la reina![1].

Enarbolando la bandera se lanzó contra el enemigo. Al grito de ¡Viva nuestro General¡, los batallones del Córdoba siguen a Prim  y con renovados bríos consiguen frenar el empuje enemigo y hacerle retroceder. Instantes después,  llega el general Zabala con los batallones Arapiles, Saboya, León y Simancas de refuerzo. Las posiciones se han mantenido. Todavía habría un postrero asalto de los moros, que serían nuevamente rechazados. Sobre las 16:00 la división de Prim es relevada por la división Orozco. La victoria se había conseguido.

1860. General Prim en Castillejos.

Después se sucedieron otras victorias en Tetuán (4 de febrero de 1860) y Wad-Ras(23 de marzo de 1860).   Y tras un periodo de armisticio de 32 días, se firmó el Tratado de Wad-Ras en Tetuán el 26 de abril, por el que España ampliaba el territorio de Ceuta y Melilla y recibía el pequeño territorio de Santa Cruz de Mar Pequeña (Ifni) para establecer una pesquería, además, Marruecos pagaría una indemnización de guerra, y hasta que esta última se hiciera efectiva Tetuán era cedida a España.
Con la acción de la bandera el General Prim enardeció a las tropas para que dieran el empuje definitivo. La bandera es el símbolo de la Patria, sobre la que se jura defenderla y representa el espíritu y el prestigio de la unidad, y perderla frente al enemigo constituye un deshonor. Este tipo de acciones de defender la bandera hasta el último aliento para que no caiga en poder del enemigo, y de alentar a las tropas con la bandera y  son una constante en los ejércitos desde la época de los romanos con sus estandartes. En la historia de España cabe reseñar por ejemplo, que en los gloriosos tercios de los siglos XVI y XVII las "compañías o capitanías" también eran conocidas con el nombre de "banderas", ya que en torno a las mismas se organizaba el reclutamiento, y en combate ocupaban el centro de la formación agrupándose  los tercios en torno a ellas. Esta tradición es actualmente conservada por la Legión y la Brigada Paracaidista cuyos batallones son denominados banderas.

Estos hechos muestran el profundo sentimiento que une al soldado con su bandera, en la que proyecta su profundo amor a la patria y sobre la que ha jurado defenderla hasta la última gota de su sangre. 
 
LA BANDERA DEL 2ª BATALLÓN DEL REGIMIENTO CÓRDOBA nº 10.

La bandera protagonista de estos hechos, perteneciente al 2º batallón del Regimiento Córdoba nº 10, quedó en poder del propio general Prim, y después de su muerte, pasó a manos de sus descendientes.
Las banderas de las unidades militares de aquella época respondían al modelo de bandera nacional aprobado por el Real Decreto de 1843, es decir con los colores rojo y gualda, llevando en su centro el escudo de las armas reales sobre el aspa de Borgoña y con un lema alrededor en letras negras que expresaba el arma, el nombre y número del regimiento y del batallón.
 
El 24 de octubre del año 1984, Don Rafael Muñoz Areños, heredero legítimo del general Prim, donó la bandera original de la batalla de Castillejos a la Academia de Infantería en un emotivo y sencillo acto en el patio de la academia en el cual la bandera del 2º batallón de Regimiento Córdoba nº 10 fue recibida con todos los honores y ocupó un puesto en formación junto con la bandera de la Academia de Infantería, ambas portadas por dos alféreces cadetes del arma.

La bandera fue colocada en un cuadro y expuesta en el museo de la Academia.
Al cumplirse el II centenario del nacimiento de Juan Prim el Museo del Ejército organizó la exposición «Juan Prim y Prats, de soldado a Presidente» celebrada del 25 de noviembre del 2014 al 12 de abril del 2015. El Museo del Ejército con las exposiciones que realiza pretende el doble objetivo de conservar y difundir el patrimonio, y para llevarlo a cabo además de la difusión que se realiza con la propia  exposición, se han restaurado de cinco banderas relacionadas con la vida  del General Prim: la del Regimiento de Infantería Zamora, la primera unidad de fuerzas regulares a la que fue destinado durante la 1ª guerra carlista; la bandera del 1er Batallón del Regimiento de Infantería Albuera nº 26; una bandera marroquí que fue tomada en la batalla de Castillejos por el Cabo de Húsares de la Princesa Pedro Mur; otra bandera marroquí que ondeaba en la Alcazaba de Tetuán al ser conquistada; y, la más importante y destacada, la del 2º Batallón del Regimiento de Infantería Córdoba nº 10, que enarboló Prim en la batalla de los Castillejos, protagonista de este relato.

Actualmente la bandera restaurada preside la sala del General Prim del museo de la Academia de Infantería de Toledo dedicada a este insigne militar y político. La presencia de esta bandera, su significado y su historia constituyen una inspiración constante para todos los alumnos que se forman en la academia.
 
Bandera de 2º batallón del Regimiento Córdoba nº 10.
Batalla de Castillejos 1860.
Museo Academia Infantería.



[1] Pedro Antonio de Alarcón. “Diario de un testigo de la guerra de África”.  Editorial Gaspar y Roig. Madrid, 1859.

jueves, 29 de enero de 2015

Paracaidista alemán. Italia 1943

A finales de 1942 se ha empezado a formar la 2ª División Fallschirmjäger (FJD), creada sobre la base del 2º Regimiento (FJR 2), al que se sumarán los nuevos regimientos 6º y 7º. A primeros de febrero es puesta bajo el mando del recién ascendido General Ramcke, jefe de los paracaidistas del Africa Korps.

El 30 de abril la 7ª Flieger Division (División Aérea, formada por paracaidistas) pasa a ser la 1ª División Paracaidista, organizada como una división de infantería, integrando al nuevo FJR 4 junto con los antiguos FJR 1 y FJR 3.

En julio se ha constituido el XI Fliegerkorps formado con las dos divisiones paracaidistas bajo el mando del General Student.

El 11 de julio, al día siguiente de la invasión aliada de Sicilia, el FJR 3 de la primera división es transportado a Roma siendo lanzado el día 13 de julio en la planicie de Catania para integrarse en el Kampfgruppe Schmalz. El 17 de julio el FJR 4 con algunos apoyos llega para reforzar al sector este de Sicilia. Los alemanes no pueden parar el empuje de los aliados y van retirándose. El 17 de agosto todavía resisten en las inmediaciones de Messina. Poco después las tropas alemanas evacuarían Sicilia, habiendo sufrido los Fallschirmjäger grandes pérdidas.

El 25 de julio el XI Fliegerkorps al mando del general Student, se encontraba en Roma. Cuando el 8 de septiembre los italianos anuncian su rendición los alemanes desarman a las tropas italianas haciéndose con el control del norte y el centro de Italia.

La siguiente mañana el II/FJR 6 fue lanzado en Monterrotondo, al este de Roma para intentar capturar al Mando Supremo Italiano. La operación se ejecuta de forma brillante pero el Cuartel General (HQ), había sido evacuado poco antes.

El día después del desembarco de Salerno, el 9 de septiembre, el III/FJR 1 fue enviado a la zona con la división “Hermanngöring”para reducir la cabeza de desembarco. Pronto sería seguido por el I/FJR 3, el II/FJR 3 y la mayor parte del FJR 4.
 
El 12 de septiembre en una audaz operación dirigida por Otto Skorzeny, una compañía del batallón Lehr, I/ FJR 7, junto con comandos del 40 Waffen SS, desembarcan en planeadores en el gran Sasso y liberan a Mussolini.

Además otras unidades de la 2ª división participaron operaciones paracaidistas: el III FJR 7 participa en el asalto a la isla de Elba, y el I/FJR 2 salta en la isla de Leros en el Egeo.

Abandonada la zona de Salerno, el 19 de agosto, la 1ª FJD cubrió la retirada de las fuerzas alemanas.

El avance aliado continúa a través de Italia, pero son detenidos en la línea Gustav. En dicha línea, que cerraba el paso hacia Roma, despliegan en la zona de Montecassino los I y II/FJR 1 y el III/FJR 3. Aguantarán los envites aliados durante alrededor de 5 meses, escribiendo páginas de gloria en el historial de los Fallschirmjäger.

Al norte del área de Roma, en Perugia, es formada la 4ª División paracaidista, que fue la primera de estas unidades creadas hacia el final de la guerra con personal de otras unidades de la Luftwafe y nuevos reclutas. Estaba compuesta por los 10º, 11º y 12º Regimientos. Será enviada a intentar reducir la cabeza de playa formada por el desembarco aliado en Anzio, que había tenido lugar el 22 de enero de 1944 con intención de romper la línea Gustav. Más tarde, a mediados de mayo, una vez rota la línea de defensa alemana, esta división será la última unidad en abandonar Roma el 4 de junio.

A partir del otoño de 1944 la 1ª y la 4ª FJD combaten a los aliados intentando retardar su avance en la zona de Florencia y el paso de Futa. La siguiente línea de defensa alemana, será la línea Gótica desde el sudeste de Spezia, a lo largo de los Apeninos, hasta el sudeste de Rimini en donde también tomarán posiciones las divisiones paracaidistas. a finales de agosto se inicia el ataque a la línea Gótica, que es detenido hasta la primavera del año siguiente.

En abril del 1945 la 1ª y la 2ª FJD combaten en la zona de Bolonia en donde sufren una gran ofensiva aliada que les obliga a retirarse hacia el norte. Durante el paso del Po sufrirán grandes pérdidas. Finalmente el 2 de mayo las fuerzas alemanas en Italia se rinden a los aliados.

La campaña de Italia ha terminado.

Figura:

La figura es de la marca Andrea en 54mm, a la que se le ha sustituido la cabeza por una de Verlinden.

Está ambientada en algún lugar de Italia en 1943, con unas ruinas romanas. La base es de la marca Alambra.

LLeva un mono de salto (Splittermuster B Fallschirmschutzenbluse) de camuflaje tipo "splinter". Existieron varios modelos de camuflaje, como el "Tan and Water", que se alternaron con los monos de color verde.

El pantalón es un pantalón tropical en lugar del típico pantalón verde-gris.



 

viernes, 9 de enero de 2015

Cazador de Olivenza. 2º Sitio de Zaragoza 1808-1809

Olivenza es el regimiento de cazadores más veterano, siendo oficialmente levantado en 1735 como de línea con el nombre de Costa de Granada, siendo reconvertido en ligero en 1763, en Húsares de Olivenza en 1802 y en Cazadores de Olivenza en 1805.

La misión de la caballería ligera era obtener información e impedir al enemigo obtenerla. Los húsares se encargaban de lo primero mientras que los cazadores eran los encargados de “cazar” a los jinetes ligeros contrarios.
 
En 1807, el regimiento tiene un escuadrón en Extremadura, con el Ejército de Observación de Portugal. Cuando se inicia el alzamiento dicho escuadrón se incorpora al ejército de Andalucía mandado por Castaños tomando parte en la acción de Menjibar el 16 de julio y en la batalla de Bailén el 19.
 
El resto del regimiento que se hallaba en Alicante a primeros de mayo, por lo que ha de recorrer buena parte de la geografía hispana, primero encuadrado en el ejército de Valencia-Murcia, división Llamas, y posteriormente todo el regimiento reunido formando parte del Ejército del centro.
 
Participa en la batalla de Tudela el 23 de noviembre, y tras la derrota, dos escuadrones con 223 de sus hombres y con 138 caballos se refugian en Zaragoza, donde ya se hallaban a primeros de diciembre. Participan en el 2º sitio, haciendo una salida del 31 de diciembre, acción por la que 82 cazadores recibirían una cinta roja de distinción. Al capitular la ciudad el 21 febrero 1809, los supervivientes quedaron prisioneros.
 
Los Escuadrones 1° y 2º volvieron a aparecer en tierras del Bajo Aragón, con motivo del fallido intento de recuperar Zaragoza, después de un largo periplo por Castilla y Levante. En la victoriosa batalla de Alcañiz del 23 de abril de 1809 , cargó a un regimiento de infantería polaca, cuando ya alcanzaba las posiciones artilleras propias, recibiendo ambos una cruz de distinción. El 12 de junio rechaza a los franceses en San Pedro de Calanda y los persigue hasta Fuendetodos, concurriendo el 15 a la batalla de María de Huerva, casi a la vista de la capital aragonesa. El desenlace desfavorable hace que emprenda una serie de acciones retardadoras, el 16 en Botorrita y el 18 en Belchite.

Permaneció luego en tierras valencianas y catalanas, llegando a escoltar convoyes de socorro a Gerona, además de operar alrededor de Lérida. Los escuadrones 3° y 4° estuvieron presentes en la acción de Monzón (Huesca) en marzo de 1810, mientras el 2º se rindió en Lérida el día 14 de mayo.
En 1811 hace numerosas entregas de hombres y caballos para refuerzo de otras unidades, por lo que en agosto comienza una nueva reorganización en Mallorca. Vuelto a la península, mantiene la línea de Alicante, distinguiéndose en San Vicente. Combate los días 12 y 13 de abril en la batalla de Castalla.
 
En septiembre 1813, iniciado el repliegue francés, guarnece Calanda (Teruel), antes de dirigirse a Zaragoza (diciembre), estableciendo el depósito en La Almunia.
 
En enero de 1814, con la guerra prácticamente acabada, pasa revista en Zaragoza, división mallorquina Whittingham.
 
Es disuelto en la reorganización del Ejército de 1823, integrándose sus efectivos al año siguiente, en el 2º Regimiento Provisional, refundido con Húsares y Lanceros del Rey.

Figura:

 Representa un soldado del Regimiento de Cazadores de Olivenza. La figura de 54 mm. pertenece a la serie de figuras conmemorativas de la muestra de miniaturismo que hace cada navidad la Agrupación Artística Aragonesa en Zaragoza, siendo generalmente figuras de soldados de los sitios de Zaragoza.
 
La uniformidad para los cazadores según R.O. de 1802 era: dolman, verde esmeralda, guarnecidas las costuras con un galón de un dedo de ancho y otro de medio a sus costados; dos hileras de botones blancos de cabeza de turco en cada delantero y otra hilera de botones de la misma especie, o más grandes, en el centro, de modo que abrochado presente cinco hileras y cordoncillo para abrocharlos; forro de lienzo blanco con bebederos y refuerzos de valdés encarnado, vuelta y cuello encarnado, con galón en éste y en sus dos extremos bordados en blanco, una palma y un sable enlazados. Pantalón del mismo paño que la chaqueta, en este caso el de montar, con refuerzos de cuero en el interior, y botonadura en la parte externa para poder ponérselo y quitárselo con mayor facilidad.. La prenda de cabeza era un chacó troncocónico invertido de paño negro, con visera de charol negro. Al frente llevaban en una placa metálica el nombre del regimiento, y al lado izquierdo una escarapela de color rojo, abotonada con cinta de plata, que sujetaba un plumero de color rojo. Además llevaban otros alamares de hilo blanco pendientes del chacó.
 
La primera compañía de cada regimiento era una compañía de preferencia, y para distinguirse llevaban un colbac con manga roja, con un vivo blanco, y una borla del mismo color.
 



Cazador del primer escuadrón con colbac



viernes, 2 de enero de 2015

Paracaidista español. Guerra de Ifni 1957-58


A finales de 1953 se decide la creación de la I Bandera Paracaidista del Ejército de Tierra, siendo nombrado para mandarla el Comandante Pallás. En enero de incorpora la tropa a la Escuela de Paracaidismo para iniciar el primer curso. El 23 de febrero de 1954 se realiza el primer salto paracaidista, siendo tomada dicha fecha como aniversario de la creación de las unidades paracaidistas del Ejército de Tierra.

La I Bandera tomará el nombre de "Roger de Flor", un caudillo almogávar, que fueron guerreros invencibles de la Corona de Aragón.

En 1956 se crea la II Bandera Paracaidista, que toma el nombre de otro caudillo almogávar, "Roger de Lauria". Con las dos banderas se organiza la Agrupación de Banderas Paracaidistas. 

A finales de 1957 se produjeron una serie de ataques por fuerzas marroquíes en el territorio español de Ifni, quedando una serie de puestos cercados por el enemigo, con especial peligro los de Tzelata y Tiliuin. Para liberar al primero de ellos parte una sección de la 7ª compañía al mando del Teniente Ortiz de Zárate. En el trayecto la sección es cercada, aguantando sucesivos ataques durante varios días hasta que son liberados. En esta acción perdería la vida el Teniente Ortiz de Zárate.

Más tarde, sería liberada la posición de Tiluin mediante un salto paracaidista, el primero en acción de guerra, realizado también por la 7ª compañía. Tras sucesivas operaciones en las que tomaron parte muy activa las banderas paracaidistas quedará liberado todo el territorio de Ifni.
En mayo de 1960 se ha terminado de organizar la III Bandera Paracaidista, que recibirá el nombre de "Ortiz de Zárate" en memoria del oficial muerto heroicamente en Ifni.

En diciembre de 1965, tomando como base la Agrupación se crea la Brigada Paracaidista del Ejercito de Tierra, añadiendo a las tres banderas un Cuartel General, una Compañía Cazacarros, un Grupo de Artillería, un Batallón mixto de Ingenieros, un Batallón de Instrucción Paracaidista y un Grupo Logístico.

Hoy día la Brigada tiene una composición similar, habiendo desaparecido el Batallón de Instrucción y habiéndose creado un Batallón de Cuartel General que aglutina a la compañía de Cuartel General y a las distintas unidades de apoyo operativo de la Brigada.
 
Figura:

Es una figura de 54 mm. de Miniaturas Escuadrón y representa a un Caballero Legionario Paracaidista de la 7ª compañía de la II Bandera, uno de los héroes de la sección del Teniente Ortiz de Zárate.

Lleva el uniforme de faena de color verde sarga con el correaje negro. En los brazos lleva parches rectangulares de color amarillo con el escudo de la II Bandera por ser la 7ª compañía, es decir la segunda de dicha Bandera. Las botas son la reglamentaria bota-alpargata de color blanco. En el lado derecho del pecho se puede observar el roquisqui (distintivo del curso de paracaidismo).

Como arma lleva el mosquetón máuser reglamentario.

Miembros de la Sección del Tte. Ortiz de Zarate